Alrededor de 100 empleados de un almacén Chrysler en Streetsboro, cerca de Cleveland, abandonaron sus puestos de trabajo para unirse a manifestaciones simultáneas en 38 centros de distribución de piezas General Motors y Stellantis (fabricantes de Jeep y Ram) en 20 estados de la nación, luego de que el sindicato laboral United Auto Workers (UAW) se ha declarado en huelga contra las principales corporaciones de la industria automotriz estadounidense.
Las instalaciones de Streetsboro son propiedad de Stellantis y se encargan de suministrar partes de repuesto a concesionarios Chrysler de toda la región. Los trabajadores sindicalizados forman parte del “Local 573” y se suman a los 13 000 miembros en huelga de los 146 000 adscritos a la UAW.
El evento de acción directa se suscita en reacción a un impase entre el sindicato y las corporaciones tras la expiración de su contrato laboral. El movimiento huelguista está encabezado por el presidente de United Auto Workers, Shawn Fain, una figura radical que abiertamente denuncia la desproporcionada brecha salarial entre obreros y ejecutivos.
En un comunicado reciente, que Fein suele publicar en forma de video a través de las redes sociales, el líder sindical detalla que el empleado promedio tendría que trabajar por 400 años para igualar la paga de un ejecutivo anualmente.
Al momento de redactar este artículo, de los tres, Ford había sido excluido de las protestas ya que la compañía accedió a cumplir con algunas de las demandas propuestas por la unión durante una negociación de última hora. Sin embargo, Stellantis y General Motors no han cedido en relación a los reclamos entre los que se incluye una estandarización de salarios, seguridad de empleo, que se comparta parte de las ganancias y que se le otorgue la permanencia a los empleados temporeros.
En adición, UAW pide un aumento salarial paulatino del 36% en un término de cuatro años basándose en las ganancias generadas por la industria automotriz. Para el 2022 GM reportó $10 mil millones mientras que Stellantis obtuvo cerca de $18 mil millones.
Mediante un comunicado escrito, GM dijo haber presentado cinco ofertas “históricas” que cubren mejoras salariales y de seguridad laboral. “La escalada de huelgas por parte de los máximos dirigentes del UAW es innecesaria”, subraya el documento, añadiendo que “los dirigentes del UAW están manipulando el proceso de negociación para sus agendas personales”.
Stellantis por su parte hizo una oferta de aumentar el salario por hora de su personal a tiempo completo de entre $80 000 a $96 000 anuales en un período de cuatro años y siete meses, al igual que se comprometieron a promover la seguridad de empleo, pero de acuerdo con la empresa, esta ha sido rechazada por el gremio.
Las huelgas involucran solamente a poco más del 10% de los 146 000 miembros del UAW. Esta táctica ayuda a que el fondo de huelga –de $825 millones de dólares– del sindicato rinda por más tiempo, ya que la mayoría de sus afiliados continuará trabajando bajo las cláusulas del contrato vencido y se mantendrán contribuyendo a ese fondo.
Los trabajadores que siguen en sus jornadas cobran sueldos completos mientras que los huelguistas solo reciben 500 dólares semanales del sindicato.
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FOTO: (Facebook/UAW)