Santiago de Chile, 16 dic (EFE).- Santiago de Chile amaneció este viernes cubierto por una gran nube de humo debido a distintos incendios cercanos y las autoridades recomendaron a los ciudadanos llevar mascarillas y suspender las actividades deportivas al aire libre.
La delegada presidencial de la Región Metropolitana, que alberga la capital, Constanza Martínez, anunció que se decretó una alerta de riesgo sanitaria debido al humo y pidió a las personas de riesgo evitar exponerse al humo.
"Hay que evitar los traslados que no sean estrictamente necesarios", dijo en declaraciones a los medios.
El humo proviene de varios incendios cercanos, entre ellos el del Fundo Carén, en la localidad de Curacaví, a 55 kilómetros al este del centro de Santiago y donde el fuego ya ha afectado a cerca de 2.000 hectáreas.
La Oficina Nacional de Emergencia (Onemi) explicó en redes sociales que el humo de los incendios forestales "es una mezcla de gases y partículas de árboles y materiales que puede dañar ojos, irritar el sistema respiratorio y empeorar la condición de salud de personas con problemas cardíacos, pulmonares y respiratorios".
"Acá, en el hospital de Maipú (un barrio de la periferia capitalina) tenemos todo cerrado. Está asqueroso el aire", indicó a EFE Nuria Tomás.
"Estoy con las ventanas cerradas porque se siente mucho el olor", añadió por su parte Paola Domíngez, una vecina del centro de la capital.
Los incendios y la nube de humo coinciden con una ola de color inédita en años. Los termómetros de la capital chilena marcaron el jueves 36,7°C, la temperatura más alta en los últimos tres años -cuando también se registraron 36,7°C- y la segunda más elevada desde 1950 para diciembre.