Rosas (Colombia), 12 ene (EFE).- El presidente de Colombia, Gustavo Petro, visitó este jueves Rosas, la localidad del departamento del Cauca donde un gigantesco alud destruyó cinco caseríos, un tramo de la vía Panamericana y dejó más de 700 damnificados, a quienes prometió la compra de terrenos para reubicarlos.
El encuentro tuvo lugar en el albergue acondicionado en la Institución Educativa Santa Teresita, ubicada en la cabecera municipal, a donde el mandatario llegó en compañía de miembros de su gabinete ministerial.
En ese espacio había más de 200 personas que el pasado 9 de enero escaparon de madrugada de los caseríos de Santa Clara, Párraga Viejo, La Soledad, Chontaduro y La Manguita, donde ahora solo hay un panorama desolador de barro y piedras.
Durante el encuentro, Petro indicó que se comprará un terreno ubicado en una hacienda para que las familias damnificadas puedan tener un sitio seguro para vivir, pues la zona arrasada por el alud quedó inhabitable.
"Las personas afectadas no pueden volver a vivir ahí y se impone la reubicación de estas familias campesinas, que no solo tenían sus viviendas, sino todo su sustento", indicó el presidente.
TIERRAS FÉRTILES Y SERVICIOS
Según el jefe de Estado, "el conteo inicial indicaba que era necesario entregar media hectárea por familia, pero eso no es suficiente para vivir, progresar y educar a los hijos", y añadió: "Vamos a ubicarlos en un lugar muy concreto, una hacienda de tierras muy fértiles".
"El Estado compra la hacienda, la Ley 1523 (que creó el Sistema Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres) nos permite hacerlo en menos de 15 días y esta reubicación puede ser el comienzo de una gran zona campesina que, incluso, nos ayude a aliviar las tensiones del norte del Cauca", subrayó.
El mandatario añadió que la reubicación en estos terrenos deberá incluir una zona escolar y servicios de salud, entre otros.
ALTERNATIVAS A LA VÍA PANAMERICANA
En relación al cierre de la vía Panamericana, el presidente dijo que en un mes se podrá dar una solución provisional que permita conectar al país con el departamento de Nariño, limítrofe con Ecuador, y con el resto del continente.
Entre las medidas está un puente aéreo, la adecuación de carreteras vecinales para que puedan transitar por ahí los camiones con mercancías, e incluso, una conexión marítima que permita sacar desde el puerto de Tumaco los productos de Nariño hacia Buenaventura.
"Esto permitirá que por primera vez en Colombia hablemos de la creación de nuestra marina civil", dijo Petro.
El presidente también habló de un ambicioso plan que incluye continuar las obras de doble calzada que se ejecutan entre Santander de Quilichao y Popayán, capital del Cauca, para que lleguen hasta las localidades de Timbío, Estanquillo, Chachagüí y Pasto, la capital de Nariño, y a Ipiales, en la frontera con Ecuador.
"Esta es la obra más importante que se haya hecho en el sur del país porque nos comunica con Suramérica", dijo el presidente, quien señaló que los estudios iniciales indican que esta carretera tendrá un costo superior a los 12 billones de pesos (unos 2.560 millones de dólares).
Finalmente, el presidente hizo un llamado a los alcaldes de todo el país para que trabajen en la identificación de las zonas de riesgo en sus municipios para evitar tragedias por las lluvias que, según él, se prolongarán hasta junio.