CLEVELAND, Ohio — En la comunidad existen diversas agencias sin fines de lucro, las cuales están al alcance de distintas necesidades. Entre ellas se encuentra Catholic Charities, donde se ofrecen programas para prevención y tratamiento de abuso de alcohol, drogas y violencia doméstica. En esta ocasión, La Mega Nota entrevistó a su directora Ramonita Rodríguez-Johnson, mejor conocida como Nina, quien –por los pasados 45 años– se ha mantenido sirviendo a todo el que llegue a su agencia requiriendo los servicios disponibles.
La Mega Nota: ¿Dónde nació y quienes fueron sus padres?
Ramonita Rodríguez: Yo nací en Cleveland en 1956. Mis padres fueron Ramonita y Carlos Rodríguez Lugo. Ellos vinieron de Puerto Rico; eran de Yauco. Me enseñaron sobre la cultura boricua, valores y principios. Al inicio no fue fácil porque fuimos una de las primeras familias hispanas en establecerse en el West Side.
La Mega Nota: ¿Dónde completó sus estudios universitarios y cuál fue su concentración?
Ramonita Rodríguez: Me gradué de Lincoln West High School, luego entré a Cleveland State University donde obtuve un bachillerato [licenciatura] en trabajo social. Después de diez años de casada y con un hijo, regresé a estudiar y completé una maestría en educación con concentración en consejería a la comunidad.
La Mega Nota: ¿Cómo fueron sus inicios en Catholic Charities?
Ramonita Rodríguez: Después que terminé la universidad, en septiembre mi novio (actualmente mi esposo) me informó de este trabajo y comencé con Catholic Charities que en aquel tiempo se llamaba Centro de Consejería Católica como parte de Caridades Católicas. Inicié en septiembre de 1978 como trabajadora de jóvenes, específicamente como trabajadora social del programa de jóvenes y prevención de alcohol y drogas.
La Mega Nota: ¿Puede describir de qué se trata el proyecto de veranos para los jóvenes?
Ramonita Rodríguez: Es uno de mis programas favoritos. Comenzó en 1982 y fue con mi compañero en aquel tiempo, el Sr. Luis Del Valle. Los dos iniciamos el programa para que ellos no estén sin hacer nada en las calles durante el verano. Después de 41 años fundado, aun está vigente, permitiendo a los jóvenes generar ingresos, pues es un trabajo temporero de verano. Además, se desarrollan en el arte. Nosotros les facilitamos todos los materiales y ellos mismos crean los “puppets” [marionetas]. El propósito es visitar centros de cuido y diferentes agencias, y presentar un show de “puppets”.
La Mega Nota: ¿Cuál es el principal enfoque?
Ramonita Rodríguez: El tema principal es concientizar y prevenir el uso de alcohol y drogas. Se dan a la tarea de crear los “puppets”, escribir libretos y presentar un show por medio del cual transmiten un mensaje positivo y de prevención. Además, dibujan y escriben mensajes positivos en cartulinas. Comenzamos este programa para darle algo que hacer a los jóvenes, ocupando bien su tiempo y que no estén en las calles.
La Mega Nota: ¿Cómo define su rol y qué programas ofrecen?
Ramonita Rodríguez: Desde 1981 comencé como directora hasta hoy día. Además, soy directora de Spanish Senior Center de Catholic Charities. Algunos de los servicios que ofrecemos consisten en hacer consejería, tratamiento en alcohol y drogas, y violencia doméstica. Tenemos disponibles departamentos de mujeres, hombres y jóvenes. El Programa de Spanish Senior Center es para adultos de 60 años en adelante. Aquí aprenden manualidades, reciben charlas educativas sobre prevención en salud y como tener una dieta balanceada.
La Mega Nota: ¿Cómo se resumen 45 años de labor social?
Ramonita Rodríguez: Es una bendición servirle a la comunidad que amo. Aprecio trabajar con personas que son dedicadas y sienten el mismo amor por los clientes; son compañeros de trabajo que hacen sentir bien a los clientes, como en su casa.
La Mega Nota: ¿Cuáles son las metas que le quedan por cumplir?
Ramonita Rodríguez: Continuar sirviendo a la comunidad hispana y seguir siendo una buena directora para ambos programas.
La Mega Nota: ¿Piensa jubilarse?
Ramonita Rodríguez: Realmente más que nada pienso en quién me va a sustituir, deseo poder retirarme tranquila. Sabiendo que el siguiente director que venga posea el mismo enfoque y dedicación hacia la agencia y los clientes. La parte más difícil de irme es asegurarme que la persona que ocupe este puesto directivo trate a los clientes y a los compañeros de oficina con respeto y compromiso.
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FOTO: (La Mega Nota/David Rodríguez)
