Marcia Moreno es oriunda de Chile y llegó a Cleveland en 2005 tras recibir una beca para la Cleveland State University en teoría de comunicación. Desde muy joven siempre tuvo una afinidad por el periodismo, no obstante, sus vivencias como mujer hispana en esta ciudad le llevaron en una dirección menos convencional y que culminó con el establecimiento de su propia firma asesora, AmMore Consulting LLC.
Graduada de la Universidad de Concepción en su tierra natal, pasó a desempeñarse en dicha institución como periodista para la oficina del rector, ocupándose de todo lo relacionado a relaciones públicas y comunicación corporativa. Durante ese tiempo, impulsada por internacionalizar su perfil personal y profesional, al presentarse la oferta de estudiar en los Estados Unidos, la aprovechó.
Originalmente, en sus planes no cabía la probabilidad de asentarse aquí en Ohio.
“Yo no llegué con la expectativa de quedarme, venía por dos años. La beca era solamente para estudiar y una vez terminara la maestría iba a regresar a mi trabajo en Concepción, pero pasaron muchas cosas personales, se fueron dando las oportunidades y también conocí a mi esposo, así que terminé quedándome”, recordó Marcia Moreno durante una entrevista con La Mega Nota.
“Una parte importante de mi relación con Cleveland es el agradecimiento por esta oportunidad, y como abrió sus brazos para que yo le llamara mi hogar. Vine con nada, y pues cuesta venir a un país con otro idioma y otra cultura”, añadió Moreno.
A Cleveland –según afirma– todavía le falta mucho para que sea un lugar “super acogedor” de inmigrantes y personas de afuera:
“Esta ha sido la esencia del compromiso y lo que hago con mi [firma] consultora: tratar de atraer más latinos, inmigrantes y gente nueva para que vean que Cleveland es un lugar que ellos también pueden llamar hogar”.
Desde su perspectiva, es necesario que el consenso estadounidense en general incorpore más “textura” a sus conversaciones sobre la personificación latinoamericana, destacando el polifacetismo social y cultural que abarca el continente al igual que los diferentes factores de circunstancias migratorias.
“Venimos a contribuir, a educarnos, a formar familias y a trabajar duro. No tenemos porqué quedarnos, lo hemos hecho porque lo hemos decidido. Esto es importante ponerlo dentro de todas las historias que se cuentan sobre los latinos”, subraya.
“Porque se dice que todos somos criminales, que todos somos malos, delincuentes o drogadictos. Eso me ‘hierve la sangre’ y me hace querer trabajar aún más duro para –por medio de mi compañía– educar y concientizar sobre la diversidad y complejidad de los latinos que vivimos en EE. UU.”, explicó.
La creación de AmMore como firma asesora se conceptualiza a raíz de sus experiencias en el entorno laboral y carrera profesional. Reconociendo patrones de deficiencias en conocimiento patronal y corporativo relacionado a la persona hispana, ella busca que se aprenda a valorar el potencial hispano, apoyar a este empleado y, sobre todo, hacerles sentir bienvenidos e incluidos.
“Quería promover una cultura y ofrecer un servicio para que las organizaciones [en general] entendieran que significaba atraer y retener talento latino, y por qué es importante que seamos incluidos como parte de un grupo estratégico dentro de Estados Unidos”.
Y añade que esto no es tan simple como la gente cree.
“La realidad es que los latinos somos muy diversos, existen segregaciones culturales. Eso es algo que no se entendía muy bien en la región, había mucha ignorancia sobre esto”, destacó la empresaria chilena.
“Aquí todavía mucha gente no nos valora, no nos ve, no nos entiende. Entonces cree AmMore para ayudar a generar ambientes de trabajo y corporativos que sean más inclusivos para el talento latino”, puntualizó.
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FOTO: (Cortesía/Marcia Moreno)
