Nueva Delhi, 18 mar (EFE).- La segunda ola de casos de coronavirus en la India sigue en ascenso después de que este jueves se registraran los peores datos desde principios de diciembre, con 35.871 infecciones, mientras se acercan importantes festividades indias como Holi que hacen temer que los positivos se disparen.
La India supera así por primera vez desde diciembre las 35.000 infecciones, después de meses de gran optimismo cuando los casos iban en continuo descenso, llegando a rebajar los 10.000 positivos en febrero, aunque desde entonces los números han dado un vuelco.
El primer ministro indio, Narendra Modi, ya advirtió el miércoles de la necesidad de detener esta segunda ola cuando se encuentra todavía en su fase inicial, después de que el primer pico de la pandemia llegó a alcanzar casi 100.000 casos diarios en septiembre.
Con estos nuevos casos, el total de infecciones en la India ascienden a 11,4 millones, manteniéndose como el tercer país con más positivos confirmados, solo por detrás de Estados Unidos y Brasil.
El mayor incremento de nuevos positivos se sigue produciendo en el estado occidental de Maharashtra, cuya capital es Bombay, con 23.179 nuevas infecciones, lo que supone algo más del 63 % de los casos en la última jornada, según los últimos datos oficiales.
Además, el 85 % de los casos proceden de 6 de los 36 estados y territorios de la India, aunque el número de infecciones en las otras cinco regiones está muy por debajo de los datos de Maharashtra, con el meridional Kerala, el segundo en la lista, con 2.098 casos, o el norteño Punyab, el tercero, con 2.013.
Por otro lado, se confirmaron 172 muertes en las últimas 24 horas, lejos de las más de 1.200 diarias en septiembre, con Maharashtra también con el mayor número de decesos (84), seguido de Punyab (35) y Kerala (13), elevando el total a 159.216.
Asimismo, las autoridades indias destacan que se han llevado a cabo hasta ahora más de 230 millones de test, mientras sigue avanzando la campaña de inmunización lanzada en enero, con más de 37,1 millones de dosis administradas hasta ahora.
En total 6,5 millones de personas han recibido las dos dosis necesarias, una cifra aún muy lejos del objetivo del Gobierno indio de inmunizar a 300 millones para mediados de año.
La nueva ola se achaca en parte a una relajación en general entre la población de las medidas de prevención, algo que se ve reflejado en mercados y restaurantes repletos, y un uso casi inexistente de las mascarillas allí donde es menor la presencia de la Policía, que impone multas a los infractores.
Además, la situación puede empeorar aún más con la llegada de importantes festividades como Holi, en la que a finales de este mes los hindúes celebran la llegada de la primavera arrojándose polvos de colores y agua, cuando aún no está claro si las autoridades indias impondrán o no fuertes restricciones a este evento.
