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Ippei Mizuhara, el ex intérprete de Shohei Ohtani involucrado en un escándalo de apuestas en el que fue acusado de robarle millones al pelotero japonés, se declaró culpable el martes ante un tribunal federal de cargos de fraude bancario y fiscal.
Mizuhara se declaró culpable de un cargo de fraude bancario, que conlleva una sentencia máxima de 30 años en una prisión federal, y un cargo de presentación de una declaración de impuestos falsa, que conlleva una sentencia máxima de tres años en una prisión federal.
La fecha de su sentencia está fijada para el 25 de octubre a las 5 p.m. hora del este.
Mizuhara, de 39 años, fue despedido por los Dodgers el 21 de marzo en medio de informes periodísticos de que se transfirieron al menos 4,5 millones de dólares de las cuentas de Ohtani a un presunto corredor de apuestas ilegal, Mathew Bowyer. Ohtani acusó a Mizuhara de “robo masivo”, alegando que Mizuhara había tomado el dinero sin su conocimiento. Las autoridades federales acusaron a Mizuhara de fraude bancario el 11 de abril y publicaron una declaración jurada de 37 páginas que describe cómo el ex intérprete obtuvo acceso a las cuentas de Ohtani y utilizó el dinero para “alimentar su insaciable apetito por las apuestas deportivas ilegales”, dijo el fiscal federal Martín Estrada.
Al final, las autoridades dijeron que Mizuhara tomó casi 17 millones de dólares de Ohtani.
Mizuhara había trabajado para Ohtani desde la llegada del jugador a Estados Unidos en 2018, cuando Ohtani contrató a Mizuhara como su manager e intérprete de facto, según documentos judiciales. Su relación duró más que eso, ya que Mizuhara trabajó para los Nippon-Ham Fighters de NPB cuando Ohtani jugó profesionalmente en Japón de 2013 a 2017. La investigación no encontró evidencia de que Ohtani se asociara con Mizuhara para realizar apuestas, ni de que Mizuhara hubiera realizado ninguna apuesta. sobre el béisbol, dijeron los fiscales.
Mizuhara se declaró culpable de un cargo de fraude bancario, que conlleva una sentencia máxima de 30 años en una prisión federal, y un cargo de presentación de una declaración de impuestos falsa, que conlleva una sentencia máxima de tres años en una prisión federal.
La fecha de su sentencia está fijada para el 25 de octubre a las 5 p.m. hora del este.
Mizuhara, de 39 años, fue despedido por los Dodgers el 21 de marzo en medio de informes periodísticos de que se transfirieron al menos 4,5 millones de dólares de las cuentas de Ohtani a un presunto corredor de apuestas ilegal, Mathew Bowyer. Ohtani acusó a Mizuhara de “robo masivo”, alegando que Mizuhara había tomado el dinero sin su conocimiento. Las autoridades federales acusaron a Mizuhara de fraude bancario el 11 de abril y publicaron una declaración jurada de 37 páginas que describe cómo el ex intérprete obtuvo acceso a las cuentas de Ohtani y utilizó el dinero para “alimentar su insaciable apetito por las apuestas deportivas ilegales”, dijo el fiscal federal Martín Estrada.
Al final, las autoridades dijeron que Mizuhara tomó casi 17 millones de dólares de Ohtani.
Mizuhara había trabajado para Ohtani desde la llegada del jugador a Estados Unidos en 2018, cuando Ohtani contrató a Mizuhara como su manager e intérprete de facto, según documentos judiciales. Su relación duró más que eso, ya que Mizuhara trabajó para los Nippon-Ham Fighters de NPB cuando Ohtani jugó profesionalmente en Japón de 2013 a 2017. La investigación no encontró evidencia de que Ohtani se asociara con Mizuhara para realizar apuestas, ni de que Mizuhara hubiera realizado ninguna apuesta. sobre el béisbol, dijeron los fiscales.
