Tegucigalpa, 2 feb (EFE).- El sector turismo de Honduras perdió en 2020 debido a la pandemia de la covid-19 y los daños causados por las tormentas tropicales Eta e Iota, que azotaron Centroamérica en noviembre, más de 1.300 millones de dólares y unos 100.000 empleos.
"El 2020 es un año que nos dejó muchas pérdidas y este sector es muy vulnerable, muy sensible que con mucha facilidad una tormenta trastoca los planes de un turista para poder hacer turismo", dijo a Efe el subsecretario de Turismo de Honduras, Selvin Barralaga.
Según datos de la Cámara Nacional de Turismo de Honduras (Canaturh), citados por Barralaga, la paralización del sector turístico en el país por el coronavirus SARS-CoV-2, causante de la covid-19, provocó en 2020 pérdida por "más de 30.000 millones de lempiras (1.239 millones de dólares)".
Honduras también perdió 2.600 millones de lempiras (107,4 millones de dólares) en daños a infraestructura turística por los efectos de las tormentas tropicales Eta e Iota, que azotaron Centroamérica en noviembre de 2020, de acuerdo a un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), señaló.
"El 2020 es un año para la historia, pero en términos negativos", subrayó Barralaga, quien indicó además que el turismo hondureño perdió 7.000 millones de lempiras (300 millones de dólares) de ingresos en Semana Santa del año pasado.
PANDEMIA TAMBIÉN DESTRUYE EMPLEOS
El turismo es una actividad de "contacto, donde se requiere esa cercanía y poder tener ese contacto con la naturaleza", lo cual se ha visto afectado por la pandemia, subrayó.
La brusca caída de la actividad por el coronavirus también destruyó más de 100.000 puestos de trabajo en Honduras, donde el turismo representa el 6,5 % del producto interno bruto (PIB), lo que supone unos 40.000 millones de lempiras (1.652 millones de dólares), señaló el funcionario.
Aseguró que el 2020 es el "peor año" para el turismo, con 430 millones de dólares menos de llegadas internacionales.
La industria sin chimenea está "pasando realmente la crisis más grande en la historia", aunque las empresas han hecho "un acto de responsabilidad para poder implementar protocolos de bioseguridad para poder ofrecer esa confianza y productos diferentes", subrayó.
El 2020 fue un "año fatídico, nos dejó grandes pérdidas, realmente es algo irreparable, porque el hecho que no se aprovechen las temporadas altas, se pierde por completo", lamentó el funcionario de la Secretaría de Turismo.
Más del 90 % de las compañías de turismo en Honduras son micro, pequeñas y medianas empresas, el 87,8 % son de capital nacional y más del 50 % tienen hasta 10 empleados, según cifras de la Canaturh.
MUCHA INCERTIDUMBRE EN 2021
Las perspectivas para 2021 son de "mucha incertidumbre", aunque Barralaga confía en que con la llegada de las primeras vacunas contra la covid-19, a mediados de febrero, la situación mejore en Honduras, aunque será "un proceso lento".
Destacó que la conectividad aérea es "clave" para atraer turistas a Honduras, por lo que el nuevo aeropuerto de Palmerola, cuyas obras concluirán este año, genera muchas "expectativas", añadió.
La nueva terminal, con una inversión de más de 160 millones de dólares, funcionará en el mismo sitio donde opera una base de la Fuerza Aérea Hondureña construida por Estados Unidos a inicios del decenio de los 80 del siglo pasado.
"Honduras tiene todo el potencial para ofrecer turismo; Sin embargo, va a requerir mucho trabajo y el acompañamiento de los diferentes sectores", enfatizó el funcionario.
En su opinión, el turismo de Honduras podría tardar entre "tres o cuatro años" en volver a los niveles de 2019, cuando reportó ingresos por 620 millones de dólares.
"No es una actividad económica prioritaria hacer turismo", pero es un sector que ofrece "muchas bondades y les permite a las familias tener espacios de convivencia, poder adquirir conocimientos, pero no es una necesidad básica que el ser humano requiere", explicó.
No obstante, la Secretaría de Turismo y los empresarios del sector se están "preparando para poder cautivar" a los turistas y vean en Honduras "una oportunidad" para viajar, agregó.
El viceministro de Turismo aseguró que es "muy difícil" reinventarse en medio de la pandemia, que ya deja en el país cerca de 150.000 contagios y 3.614 decesos desde marzo pasado, cuando se reportaron los primeros dos casos, dos mujeres hondureñas.
"En Honduras hemos venidos trabajando fuertemente en implementar medidas de bioseguridad, de hecho, somos un país referente en el tema de los restaurantes que empezaron a implementar sus protocolos (...), el país está listo para recibirles", subrayó Barralaga, quien instó a los hondureños a "valorar los nuestro".