CLEVELAND, Ohio — ¿Alguna vez ha deseado disfrutar de un día familiar en alguna de las playas que rodean al lago Erie, solo para descubrir que las autoridades prohíben la entrada debido a la toxicidad del agua?
Este fenómeno, comúnmente conocido como floración de algas, ocasiona numerosos problemas tanto en la salud animal como para la humana, y preocupa el hecho de que –debido al cambio climático– sean cada vez más extensas y duraderas.
En 2022, la floración del lago Erie se prolongó casi cuatro meses en comparación con años anteriores que no duró más de dos semanas.
Si bien, Toledo y el oeste de Ohio son conocidos por las toxinas de las algas, el problema puede estar llegando a Cleveland.
Hace apenas unos años, se encontraron toxinas producidas por estas floraciones en el lago cerca de Cleveland. Así lo confirmó la periodista Laura Johnston (junio, 2018) en el artículo “Cyanobacteria found at Edgewater, Villa Angela beaches” de cleveland.com, también difundido por la agencia de noticias Associated Press.
¿Por qué son tan peligrosas?
De acuerdo con el Instituto Nacional de Ciencias de la Salud Ambiental (NIEHS, por sus siglas en inglés), estas floraciones ocurren “cuando las algas productoras de toxinas crecen de manera excesiva en un cuerpo de agua. El crecimiento excesivo de las algas se puede observar a simple vista, presentando colores como verde, azul verdoso, rojo o marrón, dependiendo del tipo de alga”, lo que se conoce –en inglés– como “algal bloom”.
En el lago Erie, la causa –en realidad– ni siquiera son las algas, sino un tipo de bacterias fotosintéticas azul-verdosas llamadas cianobacterias. Normalmente se encuentran en agua dulce, pero se vuelven dañinas cuando crecen en grandes cantidades. En inglés se identifican como HABs; matan la vida marina y enferman a los humanos.
Según los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades (CDC), los síntomas comunes de contaminación por cianotoxinas incluyen “dolor abdominal, náuseas, vómito, dolor de cabeza, diarrea, dolor de garganta, ampollas alrededor de la boca y neumonía”.
Desafortunadamente, esta enfermedad es aun poco entendida. Lorraine Backer, una epidemióloga, junto a otros expertos, describen este problema en una investigación que revisa los datos del Sistema de Vigilancia de Enfermedades Relacionadas a las Floraciones de Algas Nocivas (HABISS, por sus siglas en inglés).
“Alrededor de la mitad de los casos humanos reportaron síntomas dermatológicos después de la exposición a las floraciones cianobacterianas, mientras que un número mucho menor reportó síntomas gastrointestinales o neurológicos”.
Sin embargo, al revisar los datos de HABISS, “no surgió una imagen clínica clara de las enfermedades relacionadas a las cianobacterias y las cianotoxinas”.
Debido a que la magnitud del daño causado por las cianotoxinas todavía se desconoce, es importante evitar la exposición al agua contaminada causante de irritaciones leves en la piel y erupciones.
La principal preocupación para agencias como HABISS es el agua potable. En 2014, “residentes de Toledo recibieron la orden de no beber [y] ni siquiera tocar su agua” durante tres días cuando se detectaron cianotoxinas”, según consta en el informe “Five Years Later: Lessons from the Toledo Water Crisis”, publicado en agosto de 2019 en el sitio web de la organización Alliance for the Great Lakes.
Desde entonces, se han implementado mejores métodos de filtración y detección de cianobacterias en todo Ohio, pero tal vez no sea suficiente a medida que las HABs aumentan su frecuencia y severidad.
En 2022, los Centros Nacionales de Ciencias Oceánicas Costeras (NCCOS, por sus siglas en inglés) reportaron que “la floración de algas en el lago Erie fue más grande y severa de lo previsto”, puesto que duró hasta noviembre, unos meses más de lo habitual.
Las algas continúan formándose y causando problemas para quienes usan el lago Erie, ya sea a través de actividades recreacionales o para el consumo de agua.
El sitio web de Metroparks se actualiza frecuentemente y emite alertas acerca de la calidad del agua en las playas de todo Ohio.
Debido al conocimiento limitado disponible sobre las enfermedades causadas por cianotoxinas, es mejor evitar por completo las cianobacterias.
Así que, si está considerando disfrutar de este recurso natural el próximo verano, infórmese, verifique que la playa sea segura al momento de su visita y manténgase alerta ante las floraciones de algas tóxicas.
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*Este artículo es el resultado de talleres/asignaciones para un ensayo final en el curso Español Avanzado II, impartido por el profesor Matthew Feinberg (Ph.D.) del Department of World Languages, Literatures, and Cultures en Baldwin Wallace University (BWU). La Mega Nota inicia un proyecto de colaboración para apoyar las estrategias didácticas y el aprendizaje significativo de los participantes. Fotografía: (NOAA/T. Joyce)
