México, 3 feb (EFE).- Organizaciones empresariales señalaron este miércoles que en el sur de México, frontera con Guatemala, no hay empleo para migrantes centroamericanos, situación que agravó la pandemia del la covid-19 en la región.
En conferencia de prensa, el expresidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) costa de Chiapas, José Antonio Toriello, consideró que un 30 % de empleos en la región se perdieron "por las afectaciones de la enfermedad y a causa del confinamiento".
Además, criticó la postura del Gobierno mexicano de ofrecer empleo a los migrantes, mediante distintos programas, antes que generar fuentes para los miles de mexicanos desempleados en los estados de la región, entre ellos Chiapas a consecuencia de la pandemia.
"No podemos ser candil de la calle y oscuridad de la casa", dijo el empresario, quien aseguró que la situación se agudiza con la llegada de migrantes centroamericanos.
En el sureste mexicano y la frontera sur, la mayoría de los migrantes reciben un salario de 5.000 pesos (unos 250 dólaes) mensuales por barrer calles, limpiar canales o sembrar árboles y eso no genera un revolvente en la región.
Señaló que los extranjeros solo están en México "por un periodo corto de tiempo" ya que la mayoría está a la espera de una visa humanitaria que les permita seguir su camino hacia Estados Unidos
"Si se quiere ayudar a los migrantes se debe hacer de manera integral y la forma para hacerlo es desde el origen, es decir, se deben generar las condiciones de vida, empleo y seguridad en los países del triángulo del norte Guatemala, El Salvador y honduras, para evitar la movilidad en masa", señaló.
Este día en la ciudad de Tapachula, Chiapas, el titular de la Secretaría de Bienestar, Javier May Rodríguez, anunció que el Gobierno mexicano daría unos 1.000 empleos para migrantes y mexicanos para dar continuar con programa como la siembra de arboles y realizar actividades de los gobiernos municipales.
En tanto, también en Tapachula, migrantes hondureños solicitantes de refugio que se encuentran varados en la ciudad, acudieron a un juez federal para interponer amparos para solicitar protección a la justicia federal y al Instituto Nacional de Migración (INM) que atienda sus citas para acceder a una visa humanitaria.
Los migrantes llevan varios meses varados en este municipio esperando que las autoridades puedan agilizar sus trámites, pero no han tenido respuesta de migración.
Hasta ahora son alrededor de 47 migrantes hondureños que se han amparado y esta cifra podría aumentar en las próximas horas.
En los últimos años, miles de migrantes centroamericanos han escapado de la violencia e inseguridad que se vive en sus países tratando de llegar a México con rumbo a Estados Unidos para mejor su calidad de vida.