Roma, 3 abr (EFE).- El Nápoles salió victorioso del importante partido ante el Atalanta (1-3) y presiona al Milan en la carrera por levantar el 'Scudetto', mientras que el conjunto de Bérgamo (Italia, note) se complica su presencia en competiciones europeas la próxima campaña.
Dominó claramente el Atalanta en los primeros compases. Pero el fútbol es así de impredecible. El Nápoles, perdido, con muchas dificultades para salir desde atrás por la ausencia del español Fabián Ruiz en el once titular, sin la referencia del nigeriano Víctor Osimehn arriba, aprovechó tres acciones aisladas para llevarse el encuentro.
El belga Dries Mertens, hoy titular en el lugar de Osimhen, sancionado, tocó con la punta el balón lo justo, muy inteligente, para que no llegara el guardameta argentino Juan Musso y lo barriera dentro del área. El italiano Lorenzo Insigne, capitán, con un nivel muy cuestionado esta campaña, no falló. Penalti impecable que puso por delante a los del sur de Italia en el minuto 12.
Se igualó la batalla sobre el terreno de juego a medida que pasaban los minutos. Los locales perdieron esa agresividad y los napolitanos fueron asentándose. Y justo antes del descanso, el italiano Matteo Politano pegó el segundo zarpazo.
En una jugada ensayada, el Nápoles volvió a tirar de recursos de calidad para ampliar su rédito. Insigne picó sutilmente el balón por encima de la barrera para que Politano, con un remate a bocajarro desde el área pequeña pusiera el 0-2 en el luminoso. Dos acciones individuales servían al de conjunto que dirige el italiano Luciano Spalletti para mandar.
Cuando se cumplió la hora de partido, el neerlandés Marten de Roon reabrió el partido con un testarazo a pase del ruso Aleksey Miranchuk, que suma ya cinco asistencias en el campeonato doméstico.
El costamarfileño Boga, que entró en la segunda mitad, lo intentó desde la frontal, pero Ospina desvió a saque de esquina el disparo. Spalletti dio entrada entonces al español Fabián Ruiz, que calmó el partido en el centro del campo y mejoró la circulación 'azzurri'. Pero el Atalanta comenzó a apretar en los minutos finales, y generó ocasiones de peligro que a punto estuvieron de suponer el empate a dos.
Sin embargo, el equipo local volcado en ataque dejó espacios que aprovechó el Nápoles. El senegalés Kalidou Koulibaly recogió un balón suelto en la frontal del área propia y, con criterio, encontró al mexicano Hirving Lozano en banda que, con mucho espacio, condujo y temporizó con calidad a la espera de sus compañeros. El 'Chuky' encontró al macedonio Elif Elmas, que definió para sentenciar el encuentro y presionar al Milan, líder.
Con esta victoria, el Nápoles supera una salida complicada y empata a puntos a 'rossoneros', que todavía tienen que jugar en esta jornada.
Por su parte, los de Bérgamo (Italia, norte) se complican su presencia en Europa la temporada que viene y abren la puerta al Fiorentina en la lucha por esos puestos junto Roma y Lazio.