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Los colores de México son incontables y el amor por la tradición se ha convertido en un arte reconocido en todo el mundo.
En los cementerios hacen fiestas, comidas enormes y hasta llevan mariachis a sus seres queridos.
El tradicional pan de muerto es todo un manjar.
A los niños los disfrazan de calaveras, diablitos y otros personajes icónicos. Van de casa en casa pidiendo calaveritas dulces.
Desde 2016, se realiza el tradicional Desfile del Día de los Muertos en la ciudad de México, destacando como siempre a las catrinas, la infaltable Frida e increíbles disfraces y maquillajes “más allá de este mundo”.
Fotografía: (Flickr/Natalie Curtiss)
