San José, 8 feb (EFE).- Casi 1,2 millones de estudiantes comenzaron este lunes el curso lectivo 2021 en los centros educativos públicos de Costa Rica en condiciones especiales, en un año en el que se pretende mezclar las clases presenciales con las lecciones a distancia a través de internet, en medio de la pandemia de la covid-19.
"Los ambientes son seguros y el proceso educativo debe continuar (...) sabemos que no todos los estudiantes tienen acceso a equipos informáticos, internet o conexión y eso es una realidad dolorosa que crea una desigualdad", declaró el presidente costarricense, Carlos Alvarado, al inaugurar el curso lectivo en un colegio de San José.
Alvarado hizo un llamado a los padres de familia para que envíen a sus hijos a las aulas, pues con ello se garantiza un mejor proceso educativo y la necesaria socialización de los menores.
Este año, el Ministerio de Educación permitirá a los estudiantes mezclar clases presenciales con clases a través de internet y, además, ante las consecuencias económicas generadas por la pandemia, los alumnos podrán acudir a las lecciones sin el uniforme que históricamente exige el reglamento.
Los datos oficiales indican que este año habrá 1.196.152 estudiantes, de los cuales 509.431 corresponden a secundaria, 487.799 a primaria, 145.323 a preescolar, 14.173 a educación especial y 39.426 a la modalidad de educación para el trabajo.
Costa Rica cuenta con 4.465 centros educativos públicos y 667 privados.
Los centros educativos deben aplicar una serie de protocolos para prevenir contagios de la covid-19, como por ejemplo lavamanos y desinfección en la entrada, medidas de distanciamiento entre los menores, uso de mascarillas y diferentes periodos de recreo, para que no se mezclen muchos grupos de estudiantes al mismo tiempo.
"Por medio de la estrategia 'Regresar', que hemos desarrollado desde diferentes ámbitos, capacitamos a estudiantes y docentes en el área tecnológica, buscamos mecanismos para ejercer el derecho a la educación y a la alimentación, promovimos la seguridad de la comunidad educativa y nos preparamos con insumos de limpieza y desinfección para este año, sin embargo, lo más importante es una responsabilidad de todas las personas”, expresó la viceministra de Educación, Melania Brenes.
En días anteriores, los sindicatos del sector educativo pidieron al Gobierno que incluya a los docentes en los primeros grupos prioritarios de la vacunación contra la covid-19.
Costa Rica comenzó la vacunación el 24 de diciembre pasado al primer grupo prioritario integrado por adultos mayores y sus cuidadores, así como personal de primera línea ante la emergencia, como trabajadores de la salud, policías, bomberos, funcionarios de la Cruz Roja, de la Comisión Nacional de Emergencias, entre otros.
El país centroamericano, de 5 millones de habitantes, ha recibido hasta el momento 104.325 dosis de la farmacéutica Pfizer, pero desde mediados de enero la empresa suspendió los envíos, que venía haciendo semanalmente, pues adujo ajustes en la producción y logística.
Costa Rica espera que Pfizer reanude las entregas en la segunda quincena de febrero.
Las autoridades han dicho que la vacunación será lenta ante la gran demanda de vacunas a nivel mundial, pero esperan haber inmunizado a los 3,7 millones de adultos del país para finales de este año.