Túnez, 17 dic (EFE).- La escasa afluencia de tunecinos a los colegios electorales durante esta mañana en Túnez anticipan la baja participación que se teme ante unos polémicos comicios legislativos que boicotean los partidos políticos.
El presidente de Túnez, Kais Said, que disolvió catorce meses antes el Parlamento y convocó unilateralmente estas elecciones, animó hoy a los tunecinos a participar en lo que calificó de "oportunidad histórica para recuperar sus derechos".
Según la Instancia Superior Independiente para las Elecciones (ISIE), la participación durante las dos primeras horas fue de casi un 3%: 270.032 de los más de 9,1 millones de electores llamados a elegir una asamblea con una nueva ley electoral que sustituye las listas de partidos por candidatos uninominales a dos vueltas.
Said destacó que con este sistema electoral, aprobado por decreto el pasado 15 de septiembre, "los (candidatos) que resulten electos quedarán bajo la tutela de los electores".
La presencia de periodistas en los centros electorales superaban a los votantes que se acercaban durante las primeras horas de apertura y los presentes, en su mayoría jubilados, aseguran participar en esta consulta por deber ciudadano.
"Creo que es un buen cambio y que los partidos que dominaban el paisaje político serán eliminados. Prefiero votar a desconocidos que a partidos", explica Mohamed Mrisi, vecino del popular barrio capitalino de Bab Bhar, que vota por segunda vez en apenas seis meses y espera "de nuevo buenos resultados".
Para Mehrezia, que trabajó como periodista antes de retirarse, es la prueba de un hartazgo contra la clase política de la última década y la ocasión de que los diputados retomen su imagen de antaño "como durante la época del expresidente Habib Bourguiba, cuando eran figuras respetables, sin disputas ni violencia".
"Hasta ahora las listas de partidos eran de 200 o 300 nombres y uno se perdía. Conozco el candidato aunque no su programa pero tengo experiencia, ya no soy una niña", defiende esta electora, cuya circunscripción cuenta con un sólo candidato que será elegido automáticamente según la actual legislación.
El proyecto político del mandatario, iniciado el 25 de julio de 2021 tras arrogarse plenos poderes, pretende "rectificar" el curso de la transición que Túnez comenzó con el derrocamiento de Zine el Abidine Ben Ali en 2011, cuna de la llamada Primavera Árabe.
La futura Cámara tendrá poderes limitados y supeditados al presidente con la recién aprobada Constitución (con un 70% de abstención), que Said llevó a referéndum el pasado 25 de julio.
Un total de 1.055 candidatos (11% mujeres) concurren en esta votación, que terminará a las 17.00 GMT, a las 19.00 GMT en circunscripciones del extranjero.
El Parlamento Europeo declinó enviar observadores y la asociación local Mourakiboun será una de las pocas organizaciones en vigilar la consultad después de haber alertado de la "confusión y debilidad" que caracteriza la actual gestión.