Una histórica heladería en Cantón, en funcionamiento desde 1926, sufrió daños considerables tras un accidente provocado por un coche robado. El incidente ocurrió durante la madrugada del lunes, cuando un Honda, perseguido por la Patrulla Estatal de Carreteras de Ohio (OSHP), se estrelló contra el comedor de Taggarts Ice Cream. El conductor, identificado como Preston Cingle, de 23 años, realizó una maniobra de marcha atrás a alta velocidad, perdiendo el control y chocando contra el establecimiento.
Según las autoridades, el conductor intentó huir tras el accidente, pero fue arrestado poco después por la policía de Cantón. Afortunadamente, no hubo heridos, pero la heladería anunció en su página de Facebook que permanecerá cerrada indefinidamente mientras trabajan para reparar los daños. "Todos están a salvo y vamos a trabajar diligentemente para que Taggarts vuelva a abrir", escribió la empresa en redes sociales.
Cingle enfrenta múltiples cargos, entre ellos hurto mayor de vehículo motorizado y conducir bajo la influencia del alcohol (OVI). Actualmente, está detenido en la cárcel del condado de Stark.