Ciudad de México, 9 may (EFE).- La segunda corrida de la Feria del Traje de Luces, en la plaza de toros de "Cinco Villas" de Santiago Cuautlalpan, en el central Estado de México, cerró este domingo con una oreja para el español Saúl Jiménez Fortes.
En la faena, destacaron el mexicano Ernesto Javier "Calita" y el también español Adrián de Torres aunque no obtuvieron premio por los fallos con los aceros.
En la corrida, el ganado de Fernando de La Mora resultó blando y sin bravura aunque el primero y último dieron gran juego por su clase y bondad.
Ernesto Javier "Calita" realizó una de sus mejores faenas como profesional, en cuanto a estructura y pureza, que en cambio no supo rematar con la espada, impidiendo así un triunfo de peso.
Ante un toro de mucha trasmisión, pero escaso de fuerzas, el diestro mexicano dejó una de las faenas más memorables del 2021 ofrecida en México.
Empezó "Calita" ya toreando con el capote, sometiendo con medias verónicas al animal, con gran temple y descubriendo pronto el ritmo de embestida del cornúpeta: cadencioso y alegre.
Tras un breve encuentro con el caballo y un gran par del subalterno Diego Martínez, Ernesto Javier inició la faena de muleta con la tela desmayada, su pie fijo, el pecho de frente y cargando la suerte.
Las dos primeras tandas con la mano derecha fueron de largo recorrido y muy puras. Cada pase con la diestra resultaba más ceñido y siempre mandando con temple al toro.
Acertó "Calita" en la duración de los espacios entre tandas para dar oportunidad al estado de recuperar fuelle. Con la mano izquierda siguió el toreo arrastrando la muleta, por bajo, y de una longitud profunda que el toro siempre recorrió obediente.
De la impecable estructura tan solo sobró un pase del desdén que la poca fiereza del burel desacreditó. Una tanda de adornos no excesivos como cierre fue el prolegómeno a otra fallida interpretación de la suerte suprema del mexicano.
Su fracaso con el acero no desmereció el mensaje que dejó a sus compañeros de cartel toreando en un palmo de terreno al que abrió plaza.
Así lo interpretaron Saúl Jiménez Fortes, Sergio Flores y Adrián de Torres que continuaron por la senda de la fijeza a la hora de enfrentar el poco exigente ganado de Fernando de La Mora.
Debutaba de luces en México el español Adrián de Torres que, al igual que "Calita", dejó ir con la espada el triunfo logrado con la muleta.
Ante un toro muy blando pero de mucha bondad, De Torres logró pasajes de mucha parsimonia y delicadeza especialmente con la mano izquierda.
Si bien Adrián empezó sus dos faenas impreciso, con el que cerró plaza acabo encontrándose a gusto y mostró un toreo puro, largo y con pausa, que se vio favorecido por la bondadosa embestida del toro. Naufragó con el estoque por lo que solo obtuvo vuelta al ruedo.
La oreja de Fortes en su primer toro llegó con muy poco, una faena sin emoción. Estuvo mejor con su segundo toreando con oficio aunque ventajismo, pues se metió en la cara del toro con el animal ya a punto de rajarse, así logrando sacar pases al parado De la Mora.
Falló con el estoque y solo el buen criterio una vez más del juez Luis Gallardo evitó la segunda oreja que los presentes pedían.
Sergio Flores ofreció su mejor versión, menos expresivo y más centrado, fijo y ofreciendo buenos momentos con las dos manos en sus dos toros que fueron los peores de la tarde.
Borja Ilián