Teherán, 12 may (EFE).- El expresidente ultraconservador iraní Mahmud Ahmadineyad se registró este miércoles como aspirante a las elecciones presidenciales del próximo junio, un paso que ya dio en los comicios de hace cuatro años pero su candidatura fue rechazada.
Rodeado por numerosos de sus asesores y seguidores, Ahmadineyad se presentó en la sede del Ministerio del Interior, en la segunda jornada de registro de candidaturas para los comicios del 18 de junio.
El que fue presidente entre 2005 y 2013 aseguró que "millones de personas" de todo el país le han pedido que se presente y que, si es de nuevo descalificado, aquellos que tomen esa decisión "tendrán que responder ante la gente y ante Dios".
"En caso de que rechacen mi calificación, desde ahora mismo informo de que no apruebo las elecciones y no votaré en ellas", dijo Ahmadineyad, según el vídeo publicado en su cuenta de Instagram.
También denunció que "la situación del país es muy dura a nivel económico y político" y que la mala gestión ha hecho que la población pierda la ilusión en participar en los comicios y se haya "distanciado del sistema".
"Mentira, corrupción organizada e hipocresía. La aristocracia religiosa, política y económica ha decepcionado a la gente", aseveró.
En el exterior del Ministerio del Interior, el expresidente se subió a una valla para saludar a las decenas de sus partidarios congregados, que fueron luego dispersados por la policía.
En las últimas presidenciales de 2017, en las que resultó reelegido el moderado Hasan Rohaní, Ahmadineyad también se inscribió como candidato, generando cierta controversia.
El líder supremo, Alí Jameneí, le había desaconsejado hacerlo porque ello causaría "una sociedad bipolar que es perjudicial" para el país.
La reelección de Ahmadineyad para un segundo mandato en las presidenciales de 2009, frente a los candidatos reformistas, derivó en fuertes protestas del llamado Movimiento Verde, que denunció fraude electoral.
Pese a su intento, el Consejo de Guardianes, un órgano formado por seis clérigos y seis juristas conservadores, vetó en 2017 su candidatura a la Presidencia, algo que podría volver a ocurrir este año.
Desde que Ahmadineyad dejó la Presidencia en 2013, varios de sus principales aliados han sido acusados de corrupción, encarcelados y defenestrados de la actividad política, mientras que el expresidente ha criticado con dureza al Poder Judicial.
El proceso de registro para las presidenciales se abrió ayer, cuando se inscribieron un total de 57 personas, entre ellas Said Mohamad, un militar que dirigía hasta hace poco el mayor conglomerado de construcción e ingeniería de la Guardia Revolucionaria; y el general y exministro de Defensa Hosein Dehqan.
Esta fase termina el sábado y, a partir de ese día, el Consejo de Guardianes o Constitucional procede a evaluar las candidaturas y calificar a aquellas personalidades que considere óptimas para la Presidencia, cuyos nombres anunciará el 26 o el 27 de mayo.