Srinagar (India), 5 mar (EFE).- Las autoridades de la India dieron este viernes marcha atrás a la liberación del líder separatista cachemir y religioso Mirwaiz Umar Farooq, después de que ayer ordenaran su puesta en libertad tras mantenerlo más de un año bajo arresto domiciliario.
La liberación del líder de la separatista Conferencia Hurriyat fue anulada hoy, justo cuando Farooq planeaba reaparecer en público para pronunciar su esperado sermón en la histórica mezquita de Jamia Masjid, tras 20 meses de ausencia.
"La policía visitó a Mirwaiz para informarle de que continúa bajo arresto domiciliario y que no se le permitirá ir a Jamia Masjid para las oraciones del viernes", dijo en un comunicado la alianza de formaciones separatistas Conferencia Hurriyat.
Farooq fue uno de los miles de políticos, activistas y ciudadanos de a pie que fueron detenidos en agosto de 2019 para evitar protestas contra el Gobierno de la India tras la abolición del estatus de semiautonomía de esta región, la única de mayoría musulmana del país.
A lo largo del día de hoy, “fuerzas de seguridad se desplegaron en el exterior de su casa y en el área, convirtiendo la zona en una guarnición”, denunció Hurriyat al tiempo que aseguró que esta decisión "ha herido los sentimientos de las personas y las ha agraviado aún más".
Cientos de simpatizantes que esperaban la reaparición de Miwaiz en Jamia Masjid expresaron su descontento levantando consignas contra la India y a favor de la libertad del clérigo, relataron a Efe algunos testigos.
Mientras que a las afueras de la mezquita, decenas de personas arrojaron piedras a las fuerzas de seguridad que se habían desplegado en el lugar.
"Hubo algunos eslóganes y protestas menores, pero no se produjo ningún suceso desafortunado", dijo a Efe un funcionario de la sala de control de la policía bajo condición de anonimato.
La detención de los líderes locales se produjo en la víspera del 5 de agosto de 2019, cuando de forma inesperada el Gobierno del primer ministro indio, Narendra Modi, retiró el estatus especial de Cachemira y el control de la región pasó a manos de Nueva Delhi.
Estos arrestos en masa tuvieron lugar además en un contexto de restricciones inéditas en el valle, con importantes limitaciones a los derechos de circulación y reunión, así como un bloqueo de las telecomunicaciones.
La región no recuperó el servicio de internet de alta velocidad 4G hasta principios de febrero, después de 18 meses de suspensión.
El control de Cachemira ha sido el centro de las disputas entre la India y Pakistán desde su independencia en 1947 del Imperio Británico, un conflicto por el que han librado dos guerras y varios enfrentamientos menores.